El objetivo del proyecto es transformar dos edificios independientes en uno único, manteniendo la envolvente y cambiando el uso de gimnasio a hospital. Se introduce un programa funcional complejo reforzando la conexión entre los edificios existentes.

Uno de los puntos clave del proyecto es introducir luz natural en un volumen cerrado con pocas aberturas. Se integran grandes cajas de luz para iluminar las estancias, de forma que ahí donde no llega la luz natural el paciente no lo percibe.

Otra parte importante es la reutilización de los materiales de fachada existentes para integrarlos en el nuevo diseño.

La calidez del interior, la comodidad de los espacios y la funcionalidad del conjunto caracterizan el proyecto.